CRÓNICA DE UNA MENTIRA ANUNCIADA

Días pasados, con posterioridad a las elecciones, el Secretario de Obras Públicas de nuestra municipalidad en entrevista radial se sinceró y admitió la realidad respecto a la construcción de la planta depuradora de líquidos cloacales. Sus palabras precisamente fueron: “Se trató de hacer un convenio. Ese convenio quedó en la nada. Era un convenio que quizás con nuestras ganas de hacer apuramos un convenio..” Vale recordar que éste fue suscripto el 19 de octubre de 2.006 entre el Presidente de ABSA y nuestro Intendente. Ello ocurrió exactamente 11 días antes de que se realizara la Audiencia Pública donde se trataría el tema. En cuanto tuve acceso a una copia del convenio pude advertir que carecía de datos fundamentales como fecha de inicio de obra, plazo de ejecución, monto de la inversión y fuente del financiamiento, por lo que lo califiqué de trucho y oportunista públicamente. Por todos los medios se publicó que las obras comenzarían en noviembre de aquel año. Obviamente pasó noviembre y no existieron indicios de obra, tampoco en diciembre, enero ni febrero. Ya en marzo de este año, se realizó un movimiento de suelo. Fue eso y sólo eso. Remoción del manto vegetal, concretamente. Esto tampoco fue casual, ya que sucedió 10 días antes de la presentación de reclamos en la oficina de ABSA que se haría el 22, día mundial del agua. Luego, durante julio y agosto se llevó acabo la medida de abstención del pago. Por aquellos días, ABSA distribuyó un folleto en el cual entre otras barrabasadas, al referirse a la planta depuradora menciona que las obras fueron encaradas desde fines de 2.006. En síntesis, durante todo este tiempo no se hizo absolutamente nada y tampoco se incluyó la obra en los presupuestos para el 2.008. Sólo tenemos la certeza de que nuestra planta depuradora no funciona y contamina, y que seguirá sin funcionar y contaminando. Ante esto surgen dos reclamos: para los líquidos cloacales, planta depuradora; y para el pueblo, la verdad.


Gerardo González